El logotipo es la imagen visual de la marca, es el eje central de la identidad visual de una organización. No sólo tiene que servir para identificar la marca, aunque esa es su primera misión, sino que tiene que englobar los valores principales de la organización.
Una organización que no tenga su propio logotipo causará una impresión peor que una que sí que tenga. Pero la creación de un logotipo no puede dejarse al azar. Hay diferentes normas que deben conocerse, aunque sea para romperlas.
Si queremos que sea fácilmente identificable tiene que ser sencillo. La sencillez facilitará establecer un vínculo entre el logotipo y la organización. Además no se verá afectado por las reducciones que se tengan que hacer.
Es importante que el logotipo se implemente en todos los elementos posibles, desde rótulos hasta la papelería de la organización. Si no lo ponemos, ¿cómo esperamos que asocie con nosotros?
Si la organización evoluciona, el logotipo tiene que evolucionar con ella. Hay empresas que nunca han modificado su logotipo como Coca-Cola.
Otras, en cambio, lo han modificado mil y una veces hasta llegar al logotipo que les funciona, véase Apple.
En su primer logotipo aparecía Sir Isaac Newton bajo un manzano, fue diseñado en 1976 por Jobs y Wayne y duró poco tiempo. Rob Janoff ese mismo año diseñó la primera manzana mordida de Apple, que era multicolor para humanizar la imagen de la empresa. En 1998 la manzana perdió el multicolor y se adaptaba al producto en el cual estuviera impresa: gris para los equipos, cromada en “Acerca de ese Mac”, blanca en la mayor parte de las publicidades, azul en Mac OS X y negra en Leopard. Y tal y como cuentan en applesfera.com, en cualquier Mac pulsando alt+g aparece una .
Una variación, temporal, que sufrió el logotipo de Apple que, junto con Nike, es de los pocos que no necesita el nombre de la marca para ser identificable; fue por la muerte de Steve Jobs. En la parte mordida de la manzana se añadió su perfil.
Y ahora, en la futura tienda de Apple de Barcelona, se ha modificado la manzana adaptándola a la corriente arquitectónica modernista de Gaudí, símbolo de la ciudad.
Otro caso es el de Google, quien, desde sus inicios, ha establecido diferentes variaciones a su logo con tal de conmemorar días señalados con sus ya famosos Doodles que pueden recuperarse aquí. Esta curiosa práctica de Google viene de sus orígenes ya que sus fundadores cada año iban al The Burning Man Festival y cuando crearon su empresa quisieron hacerle honor y fue tal el éxitos del primer doodle que desde el 30 de Agosto de 1998 han ido realizando diferentes doodles conmemorativos para días señalados que varían según el país.